Desde el mes de agosto se dicta el Taller de producción de Textos a cinco estudiantes de la Facultad
de Ciencias Sociales (FACSO), 2 varones
y 3 mujeres, alojados en la Unidad Penal
7 y 52 en la ciudad de Azul.
Esta materia es obligatoria para los primeros años de estudios
de las carreras de la FACSO y es importante para los estudiantes cursarla
porque los habilita a reconocer las particularidades de la escritura
universitaria.
El Taller
de producción de Textos se trasforma en un lugar privilegiado para que los nuevos
estudiantes realicen prácticas donde puedan ejercitar, enriquecer sus macro
habilidades: lectura, escritura, escucha y oralidad.
La propuesta de la materia es ofrecer
herramientas para resolver con la práctica aquellas dificultades que puedan
presentarse al escribir. Este trabajo se asume como un desafío porque si bien
estos procesos se suponen ya fueron aprehendidos durante el transcurso de la
enseñanza primaria y media se reconoce que necesitan ejercitación continua para
mejorarlos. El lema de trabajo es: “A escribir se aprende escribiendo”. En el Taller de producción de Textos se asume
que el proceso de escritura es recursivo y social. Pues se escribe siempre para
otros interlocutores y la producción se enriquece a partir del aporte de los
compañeros. De esta manera el hecho de escribir varios borradores de un texto,
compartir su producción, recibir aportes de sus compañeros constituye la base del trabajo de un buen
escritor, es a través de la revisión que los textos logran estar “parcialmente”
acabados.
Reconocemos
que este espacio es útil en la medida que la escritura se ofrezca a los estudiantes
como un instrumento de trabajo
intelectual que les permita reflexionar sobre sí mismos y su entorno,
complejizar visiones, aclarar ideas que quizás desconocía que tenía.
Esta concepción implica recuperar desde el
marco comunicacional el potencial de la
acción de los sujetos como constructores de los hechos, agentes activos de la
historia capaz de dotar a su entorno de novedosos sentidos y prácticas. Desde
esta perspectiva asumimos que escribir es una manera más de influir en el
mundo. El aporte que este espacio realiza a la formación del ingresante es
generar las bases para que el estudiante pueda decir/escribir/comunicar su
palabra. Así es que dictar este taller en contextos de encierro nos parece
necesario y vital para contribuir a la formación de ciudadanos, potenciando sus
capacidades y habilitándolos a ejercer sus derechos civiles y políticos.
Responsable del taller y cronista de la nota: Prof. Melina Escobedo
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